Ser mamá de una niña.
Ser mamá de una niña es algo que nunca imagine, nunca fui amante del rosa ni las flores con corazones. Hoy que soy mamá de mi Luciana tengo claro que no tiene nada que ver con el color. Cuando supe que estaba embarazada no quise ilusionarme ni afanarme con ninguno de los dos sexos. Pero…